lunes, junio 11, 2007

Grandes inventos: la TV



La historia del desarrollo de la televisión ha sido en esencia la historia de la búsqueda de un dispositivo adecuado para explorar imágenes. El primero fue el llamado disco Nipkow, patentado por el inventor alemán Paul Gottlieb Nipkow en 1884.
En 1854, el inventor francés Charles Bourseul planteó la posibilidad de utilizar las vibraciones causadas por la voz sobre un disco flexible o diafragma, con el fin de activar y desactivar un circuito eléctrico y producir unas vibraciones similares en un diafragma situado en un lugar remoto, que reproduciría el sonido original. Algunos años más tarde, el físico alemán Johann Philip Reis inventó un instrumento que transmitía notas musicales, pero no era capaz de reproducir la voz humana. En 1877, tras haber descubierto que para transmitir la voz sólo se podía utilizar corriente continua, el inventor estadounidense de origen inglés Alexander Graham Bell construyó el primer teléfono capaz de transmitir y recibir voz humana con toda su calidad y su timbre.


- Este primer teléfono, afirma Alejandro Dolina, (haciendo gala de su capacidad de jugar) permaneció archivado, nulo de funcionalidad. El verdadero invento fue el segundo-.

El primer televisor, trajo alegría a los hogares, quienes en rueda se reunían a contemplar maravillados, ese mundo mágico que de quién sabe dónde, llegaba.

Hete aquí, que el segundo televisor inaugura una era, de dimensiones tales en términos de comunicación, casi imparable.

Si a tu casa ingresa un segundo televisor, ya estás en serios problemas. Alerta!!

Si cada uno de nosotros aspira a vivir con su TV, su PC, su DVD, su Móvil.

Cuántos edificios monohabitados existirán en un no muy remoto plazo?


No sucede con los Ancianos, quienes en un acto de fe, delegaron poderes, para el cobro de sus haberes, para agilizar trámites burocráticos, se despiertan una mañana, despojados de sus ropas, de sus bienes, asilados, por su bien.

Etiquetas:


  • Contador web

  • Contador Gratis Creative Commons License
    Esta obra está licenciada bajo una Licencia Creative Commons Atribución 2.5 Argentina.