3113

"Persistencia de la memoria o Relojes Blandos". S.Dalí.

Siempre me gustó jugar con los relojes, encontraba en ello un algo mágico, tanto como que a alguien se le haya ocurrido medir el tiempo, que no es poco decir.

Cuando mis niños eran muy pequeños pasábamos penurias y zozobra, acerca de nuestros destinos, unidos, aunque con diferentes registros. Intentaba que ellos ni yo lo notáramos, aunque por momentos, cuando la ausencia del padre me oprimía el corazón, por las noches, (la aceptación de la dolorosa realidad, con nostalgias de "lo que podía haber sido", mezclada con la promesa y la expectativa del futuro) mágicamente aparecía en nuestro pequeño televisor, una rara combinación con los numeritos del reloj, y la magia siempre rompe y cambia, organizábamos el futuro inmediato, tan elemental como pensar en la comida, el baño, el juego, y la vida repentinamente se ponía en movimiento.

Y justo hoy aparece nuevamente ese jueguito: 3113...

(una mención a Todos en el reloj de arena de Apus, 18/03/07)